La esterilización, además de los numerosos beneficios médicos que supone, de los que hablaremos más adelante, también se plantea como una solución eficaz para dos graves problemas que reducen el bienestar animal: la superpoblación y las cifras de abandono.
Por un lado, según el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid: «El 99% de los abandonos en España son camadas no deseadas». También «casi el 40% de los hogares posee al menos uno de los 20 millones de animales de compañía contabilizados en España. Datos proporcionados por la Asociación Madrileña de Veterinarios de Animales de Compañía (AMVAC).
Por otro lado, por todos es sabido que la superpoblación de animales es un verdadero problema. Según Wikipedia hay 300 millones de perros en el mundo frente a 230 millones de gatos. Ojito.
Además, como comentábamos anteriormente, la esterilización implica numerosos beneficios para la salud de tu mascota. Los machos previenen el cáncer de testículos, se reduce el riesgo de prostatitis, y cáncer prostático y anal. Las hembras, por su parte, además del cáncer de mama, evitan la peligrosa y muy dolorosa piometra, que es la infección del útero. Ambos vivirán una vida más larga y sana. Por supuesto, se evita el celo y, con ello, la ansiedad y dolor que conlleva. También se reducen los niveles hormonales, y por tanto, los embarazos psicológicos. Entre felinos ayuda a prevenir enfermedades de transmisión sexual tanto en machos como en hembras.
En general, la esterilización tiene también beneficios como evitar las escapadas en busca de compañerxs en celo y con ello los posibles peligros. En machos, además, evita problemas de marcaje y previene problemas de agresividad y defensa del territorio.
Esterilizar también es una decisión rentable pues su coste siempre es inferior al de tener y cuidar de las crías. También supone una acción en pro de la sociedad pues la gestión del gran número de animales abandonados que hay supone un gasto público del que responde cada municipio. Sin olvidar que los animales abandonados podrían representar un peligro para ellos mismos y para las personas.
Finalmente, es evidente que esterilizando a nuestro animal fomentamos el respeto hacia los seres vivos lo cual nos dignifica como personas.